Protege tus activos físicos contra incendios, robos, desastres naturales y otros riesgos que afecten tu operación.
Cubre tus mercancías mientras se transportan, evitando pérdidas económicas por daños, robos o accidentes durante el traslado.
Respaldo ante fraudes internos, robos por empleados y actos deshonestos que pongan en riesgo tu empresa.
Protege tu información digital contra hackeos, filtraciones de datos, ciberataques y delitos tecnológicos.
Asegura la estabilidad financiera de tu empresa ante la pérdida de personas clave para su funcionamiento.
Cubre daños a terceros causados por tus operaciones, productos o personal, evitando demandas y pérdidas económicas.
Estamos aquí para ayudarte